Una de las viviendas más representativas de la arquitectura tradicional, con todas las características tipológicas derivadas de su construcción en el siglo XIX, es la Casa de La Montañeta, cuyo acceso da al número 1 de la calle Humiaga.

En el número 19 de la misma calle hay una construcción prehispánica conocida como Casa Honda, posiblemente la única que se conserva en el casco urbano, con todas las características de este tipo de habitación. Entre las calles Pancho Guerra, Antonio Yánez y Capitán Cortés, hay una casa con patio cuyo interés está en su complejidad volumétrica. Un sello labrado en cantería sobre una ventana indica su fecha, que sitúa en 1884.

La vivienda ubicada en el número 1 presenta un portal de madera enmarcado en cantería que da acceso a un patio, al final de este se levanta la vivienda de dos plantas. Tiene una galería cubierta con pies derechos, zapatas y balaustrada de madera que apoya en una estructura, también de madera, con soportes sobre basas de cantería. Los huecos que dan al patio y a la galería están recercados en cantería. La cubierta es de tejas a cuatro aguas sobre una estructura de par e hilera y tirantes.

Entre las calles Pancho Guerra número 2, Antonio Yánez número 2 y Capitán Cortés numero 1, la vivienda existente es producto del encuentro de una serie de volúmenes de una planta y cubierta a dos aguas, con otro de dos alturas y cubierta a cuatro aguas, todos ellos en torno a un patio abierto. El cuerpo más alto es el principal, con una fachada de huecos regulares enmarcados en cantería y un balcón con balaustrada de hierro forjado en su eje central.

En el frente a la calle Cortés, un portalón abierto en una tapia lleva también al patio entre los volúmenes más bajos, cuya peculiaridad es la de mostrar como alzado un lateral y un hastial con huecos pequeños e irregulares. La fachada interior del volumen principal al patio es una galería acristalada.