La Montaña de Los Hornos-Inagua y los pinares de Ojeda, Lina y Pajonales están ubicados dentro de la Reserva Natural Integral de Inagua, comprendida entre La Aldea, Mogán, y Tejeda. Dispone de Aula de Naturaleza situada en la antigua Casa Forestal de Ojeda y diferentes itinerarios por los antiguos caminos de herradura que cruzaban este pinar de poniente a naciente, como las bajadas a Tasarte (El Paso) y Veneguera (Los Azulejos).

Destacan como bienes etnográficos varias hoyas carboneras, refugios de leñadores y carboneros, un horno de tejas (en la vertiente del Cañadón de Tasarte) secaderos de piñas y, sobre todo, varios hornos de brea.

La brea obtenida de la quema y destilación de la madera resinosa del pino canario, conocida también por la pez, era una industria artesanal importante que alcanzó cierta relevancia en nuestros pinares desde los primeros siglos de la colonización. Aparte de producto medicinal, servía como betún impermeabilizante en la fabricación de barcos de madera, operación conocida por calafateo, tanto para la carpintería de ribera insular como para el comercio de exportación.

Se destilaba quemando la tea de los pinos en unos hornos especiales que se encuentran esparcidos por las laderas de la montaña de Inagua, de Los Hornos y Tauro, casi todos en la jurisdicción de Mogán. Son construcciones de piedra con estructura troncocilíndrica, en dos unidades comunicadas a través de un canal o tobera. La primera estructura es el horno propiamente dicho y la segunda el vaso receptor situado en un plano inferior, hacia donde se deslizaba por un conducto la brea destilada.