Realizada con un proyecto de Fernando Navarro (1900), quién seguía una primera propuesta de Mariano Belmás, albergó durante años el Conservatorio de Música y, posteriormente, fue rehabilitado para las actividades de la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.
Esta casa, de dos plantas, responde a tipos edificatorios desarrollados en Ciudad Jardín, situándose retranqueada respecto de las alineaciones, separada de las medianeras y rodeándose de jardín.
De planta cuadrangular, rota en sus vértices, se compone simétricamente respecto a la calle Pérez Galdós -a pesar de localizarse en esquina-, con un marcado eje central. Dicho eje lo definen la escalinata, el pórtico, el vestíbulo, la escalera de dos tramos y un patio transversal. Las estancias ocupan su perímetro, que se disponen en torno a una crujía central de galerías. Otra entrada lateral lleva de la cochera a la escalera de servicio. La fachada, ecléctica, es un laborioso ejercicio de ordenación y fusión de planos distintos que incluye alguna referencia neo-egipcia. El alzado a la calle Perdomo se remata con una torre-mirador en su eje, mientras los frentes laterales se componen con bow-windows que marcan la primera crujía, más unos balcones poligonales de madera.