En 1871 se le concede el título de ciudad. El centro fue declarado Conjunto Histórico en 1982 y en él destaca como principal monumento la iglesia de Santa María de Guía, también declarada Bien de Interés Cultural.
Además de la Calle del Marqués de Muni, existen otros lugares emblemáticos dentro del Centro Histórico. En 1701 se fundó el Hospicio de Santa Catalina de Siena, que incluía la ermita de San Francisco. El hospicio se transformó en cárcel y luego en almacén, para ser hoy, ya como propiedad municipal, un Centro Cultural rehabilitado y ampliado, en el que la vieja ermita es teatro, ya desde el siglo XIX.
Se ha conservado la primera crujía del hospicio, con frente a la calle Canónigo Gordillo, de dos plantas y cubierta a dos aguas, con huecos de disposición y tamaños diversos. La fachada de la ermita remata en un hastial mixtilíneo que cubre las dos aguas de la cubierta y se delimita por dos anchas pilastras; en su eje abre un gran hueco entre pilastras cajeadas, sobre la cornisa abre otro hueco menor, también enmarcado por cantería y terminado por un frontón recto.