El proyecto del Castillo de San Francisco, conocido también como “del Rey”, se atribuye al ingeniero Spanochi y las obras terminaron en 1625.
Al final del Camino Real se levanta el Castillo de San Francisco; con dos pequeñas cámaras o alojamientos y una escalera que comunicaba con la "plaza de armas", que estaba terraplenada, cubierta de baldosas y rodeada por un pretil de piedra.
El exterior, de sillares y mampostería, tenía la puerta a media altura, con puente levadizo y en contacto con las escaleras aisladas de piedra. Sólo se conserva el área del antiguo castillo, luego prisión militar, definido por un recinto amurallado con sillares regulares, de planta triangular con baluartes en punta de diamante en los ángulos nordeste y sudeste.