En la Montaña del Confital, elevada sobre la playa del mismo nombre, cerca del barrio de Las Coloradas, se sitúan las Cuevas de los Canarios. Este yacimiento ofrece una bonita visión de la playa de las Canteras y la costa norte de la isla. Este conjunto arqueológico lo forman dos grandes cuevas artificiales de habitación y otras más pequeñas, con silos, excavadas en dos niveles.
Prácticamente todas las cavidades se encuentran orientadas al poniente, lo que garantiza unos elevados índices de luz solar. Algunas de las cuevas muestran, tanto en el suelo como en las paredes, pequeños agujeros a los que se ha atribuido funciones domésticas, tales como servir de soporte a divisiones internas del espacio útil, poder suspender útiles o recipientes, entre otras posibles dedicaciones. A ellos han de añadirse la excavación en la roca de estancias de reducidas dimensiones, alacenas, etc. Como se ha señalado en otros conjuntos, las cuevas se encuentran articuladas y organizadas mediante pasos y pasillos.
En las inmediaciones existen otros vestigios arqueológicos entre los que se debe destacar una cantera dedicada a la obtención y fabricación de piedras de molino, así como otra de características similares situada en Montaña Quemada, de la que se recuperaron en los años 70 una veintena de piezas en fase de elaboración, que se depositaron en El Museo Canario. En el litoral y también en las zonas altas existían concheros que en la actualidad han desaparecido.