DE TU INTERÉS: El vino y los lagares en Gran Canaria

Una ruta por Tafira y alrededores para conocer el Patio de los Siete Lagares, sirve de inspiración para adentrarnos en el mundo del vino de Gran Canaria.

La industria del vino en Gran Canaria se afianza a finales del siglo XVI y alcanza su mayor desarrollo a lo largo del siglo XVII con una producción de tinto, blanco, malvasía y moscatel. A pesar de la crisis que afectó al sector a finales de la centuria se mantuvo alguna producción por las vegas del noroeste (Guía- Gáldar), el centro (Monte Lentiscal, sobre todo) y las áreas del sur (Tirajana).

A partir de la década de los ochenta del siglo pasado la actividad ha conocido un nuevo impulso, lo que ha generado la recuperación de parrales en diferentes zonas de la Isla, con la introducción de tecnologías modernas de cultivo y maduración.


En la zona del Centro se conservan paisajes vitícolas, y en algunas bodegas elementos técnicos tradicionales, como lagares, toneles, etc. Las cartas etnográficas municipales recogen un total de 98 lagares, en su mayor parte situados en el área de El Monte. Y en el casco de la villa de Santa Brígida sen puede  visitar  la Casa del Vino.


El lagar es la arquitectura más representativa del vino. Una construcción de mampostería y maderas pesadas, generalmente de pino. Presenta una variada tipología, desde tanquetas excavadas en la roca, con o sin lagareta, a silos comunicados para depósito del mosto, tenemos ejemplos en La Hoya de Tunte y en Las Cuevas de Ortega (Las Palmas de Gran Canaria).

Pero el modelo más común consta de la tanqueta o lagar propiamente dicho, hecho en mampostería ordinaria, donde se pisa y se prensa la uva; la lagareta o tina, donde se recoge mosto; y, una enorme viga para el prensado que se apoya en su parte delantera en un husillo y éste sobre la piedra, mecanismo móvil que ejerce con su peso la presión del artefacto.

El mosto resultante se depositaba en un primer momento en unas tinajas de barro, para llevarlo luego a los barriles y pipas que estaban en la bodega, donde se fermentaba.