DE TU INTERÉS: Patrimonio funerario: las momias del Museo Canario

Si hay algo que despierta nuestro interés son los misterios de pasado, especialmente cuando hacen referencia a nuestros ancestros. Por esa razón, los técnicos no cejan en su empeño de desentrañarlos. 

Curiosamente, la práctica totalidad de las momias que hoy figuran en la colección proceden de Acusa y Guayadeque, donde existían restos bien conservados, fáciles de encontrar por los investigadores del siglo XIX en sus exploraciones. Los datos arqueológicos disponibles en aquella época eran muy escasos, y se basaban sobretodo en la observación y en los registros históricos.

Hoy en día, gracias a las nuevas técnicas, y en el marco de las nuevas corrientes historiográficas, los expertos se plantean varias cuestiones:

¿De qué época son realmente las momias custodiadas en el Museo? ¿Proceden de la época de la conquista o son anteriores?
¿Es real la diferencia social entre momificados y no momificados? ¿Podemos dividir la sociedad de los antiguos canarios de esta forma? ¿Cuáles eran las prácticas funerarias más extendidas?
Para responder a la primera cuestión, el museo puso en marcha un programa de investigación en 2011, que dio lugar a algunas sorpresas. Por ejemplo, la datación obtenida para la momia inventariada con el número 8. Tradicionalmente este individuo había sido identificado, sin base científica alguna, con un personaje del momento de la conquista gran canaria, referenciado en diversas crónicas como Artemis o Artamy. Sin embargo, la datación realizada por el método del Carbono 14, nos indica que estamos ante un hombre que murió en alguna fecha situada entre los años 415 y 560 d. C., muy lejos pues de la conquista.


Otras dataciones obtenidas:

Momia de Gran Canaria (Inv. 8): 415-560 d. C.
Momia de Guayadeque (Inv. 10): 575-655 d. C.
Momia de Acusa (Inv. 5): 670-775 d. C.
Necrópolis del Maipés de Agaete: siglos VIII-X
Necrópolis de Maspalomas: siglos siglos XI-XV
Necrópolis de Juan Primo: siglos XII-XV

Respecto a la consideración de las diferencias sociales entre individuos momificados y no momificados, se mantiene la creencia de que las desigualdades sociales de los antiguos canarios se manifestaban en el tratamiento dado al cuerpo tras la muerte. Es probable que la preparación del cadáver, previa a su colocación en túmulos, cuevas, cistas o fosas, estuviera generalizada -es decir, el amortajamiento era una práctica extendida a la casi totalidad de la población-. Sin embargo, sería la complejidad de esa práctica (calidad de las materias primas y número de capas usadas) la que variaría en virtud de la posición social.


Pero los expertos van más allá en sus investigaciones y se plantean estudiar el estado de salud y dental de los individuos, para comprobar si -efectivamente- presentan diferencias fisiológicas que confirmen su pertenencia a grupos sociales diferentes. Estos trabajos deparan aún más sorpresas: aunque los “momificados” tienen menos caries que los “no momificados”, el desgaste dental y la esperanza de vida parece prácticamente idéntica, lo que sugiere modos de vida muy similares.

En resumen, seguimos sin tener toda la información sobre cómo vivían y cómo morían nuestros ancestros… ¿Nuestra recomendación? ¡Visita el Museo!

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